Ha pasado bastante tiempo desde la
última vez que escribí sobre mis reflexiones o de mi estilo de vida
saludable. Si os soy sincero mi intención no es abandonar el blog,
pero tampoco me apetece escribir por escribir, es por eso que en el
futuro mis publicaciones van a ser bastante aleatorias. De hecho, hoy
no tenía previsto hacerlo y mucho menos planificado nada. Y aun así,
he sentido el impulso de teclear. A pesar de que tengo la página
abandonada, sé que muchos de vosotros me apoyáis y seguís leyendo
mis entradas. Me ha sorprendido bastante comprobar que Sueños y
Metas Blog ha superado las 100.000 visitas. ¡¡¡Os estoy
profundamente a agradecido!!!
También voy aprovechar para comentaros
cómo me está yendo últimamente con lo que se refiere a mi salud. Lo
cierto, es que desde el 2016 he pasado por situaciones bastante duras
y he estado muy agobiado. Fue inevitable que tanto estrés afectase
mi peso, pasé de pesar 110 kg a recuperar los 123 kg (Para los que acabáis de conocerme no os asustéis con las cifras, soy bastante alto). Sé que si no
fuera por que tengo tan integrados los hábitos saludables,
probablemente hubiese engordado el triple. Os quiero hablar de esto,
porque me parece importante, y no pasa nada por cometer errores, todo
forma parte del camino. Soy un ser humano, y estoy aprendiendo a
asumir mis fallos con naturalidad en lugar de martirizarme por ellos.
Al final castigarse y culparse nunca traen nada bueno. Si alguno de
vosotros está pasando por algo parecido, quiero aconsejaros que os
convirtáis en vuestro mejor amigo y tengáis mucha paciencia.
¿Verdad que si una persona a la que amáis pasa por un momento
difícil le tenderíais la mano antes que reprocharle todos sus
fracasos? Pues es lo mismo cuando se trata de uno mismo. A mí me ha
costado mucho aceptar que solo yo puedo mejorar mi vida si me
convierto en mi propia fuente de apoyo.
Actualmente mi peso ronda los 115kg.
Poco a poco las situaciones han ido mejorando y he podido recuperar
algo de estabilidad. Sin duda gracias a que no puedo vivir sin mis
largas caminatas mientras escucho música y a comer de manera
inteligente. Al final el peso no deja de ser una simple cifra (que
puedo ayudar a que llevemos un control), pero lo importante siempre
acaba siendo estar bien con uno mismo y desapegarse de todo lo que
nos perjudica.
Para concluir, quiero daros las gracias
de nuevo. Tanto a las personas que me apoyáis desde el principio
como a los que estáis empezando a descubrirme. Sé que mi testimonio
puede parecer increíble y milagroso, pero lo quiero trasmitiros es
que vosotros también tenéis esa capacidad. Ya sea si queréis
adelgazar, ganar músculo, escribir una novela, o alcanzar cualquier
sueño, recordad que todo comienza con un simple y pequeño paso.
¡Namaste!
No hay comentarios:
Publicar un comentario